Luego de 30 años de esfuerzo y políticas públicas para eliminarlo, el continente americano ha sido declarado como el primero en quedar virtualmente libre de déficit de yodo, durante el Foro Internacional de Micronutrientes celebrado en Cancún, México por la Red Global de Iodo.
Este logro es fruto de años de trabajo e investigación del Dr. Eduardo A. Pretell, profesor emérito de la Universidad Peruana Cayetano Heredia y exministro de Salud, quien trabajó para incluir dosis adecuadas de yodo en la sal en el Perú y posteriormente en los demás países del continente con el fin de prevenir enfermedades relacionadas a este déficit como el bocio o el cretinismo.
El yodo es una sustancia que el cuerpo humano no puede fabricar y que es necesaria para el correcto funcionamiento de la tiroides. La falta de este elemento está relacionada a malformaciones, problemas en el crecimiento, retardo mental, abortos espontáneos e incluso la muerte y se consideraba endémica en el Perú. Según un estudio realizado en comunidades de la selva y cierra del Perú en el año de 1996, en un 97% de los poblados analizados el 10% de la población escolar sufría de déficit de yodo.
El Dr. Pretell, es pionero en los estudios experimentales y clínicos sobre la deficiencia de yodo y, desde 1966, artífice de la política y líder del programa para la eliminación sostenible de los desórdenes por deficiencia de yodo en el Perú y en América Latina. Es fundador del Consejo Internacional para el Control de los Desórdenes por Deficiencia de Iodo (actualmente Red Global de Iodo) y Coordinador Regional para América durante los últimos 30 años.
Gracias a su gestión, logró articular las políticas públicas y el apoyo de la industria salinera, junto con un adecuado monitoreo para supervisar la efectividad de las mismas y tomar las correcciones necesarias; lo cual dio como resultado este gran logro, el continente americano es el primero en estar libre de la deficiencia de yodo.
Al respecto, el Dr. Pretell comentó que “el desafío ahora es la sostenibilidad del éxito, labor que corresponde tanto a las autoridades de salud pública, como a la comunidad científica y académica, a la industria salinera, y a la población en general.”